lunes, 1 de noviembre de 2010

FELIZ FERIADO DE NOVIEMBRE

Cada 2 de noviembre, los cementerios se llenan de fieles, quienes religiosamente acuden hasta los sitios en donde descansan los cuerpos de sus seres queridos.
Esta costumbre ha sido practicada por muchos pueblos ancestrales, en donde el aspecto religioso de la fecha ha prevalecido a lo largo de los años.
Remontándonos a la historia, en el año 998, San Odilon, abad del Monasterio de Cluny, al sur de Francia, instauró para el día 2 de Noviembre, la festividad de Todos los Fieles Difuntos en la orden benedictina. En el siglo XIV Roma lo aceptó y lo extendió a toda la cristiandad.

De esta manera la fecha adquiere un interés en todo el planeta y se generaliza el 2 de noviembre como el día de los difuntos, las formas de conmemoración varían dependiendo de cada una de las culturas.

Cabe resaltar que el culto a los muertos ha sido una práctica permanente en muchas de estas culturas y ha permanecido a lo largo del tiempo como un legado ancestral de nuestros pueblos.

Si bien es cierto, en la actualidad, esta fecha se ha convertido en un suceso a nivel mundial, la forma como la iglesia la ha ido manejando a través de los años, ha causado que las tradiciones propias de cada pueblo se vayan perdiendo, y como todo en el capitalismo, esta fecha se convierta en un espacio más para el consumismo. Comprar flores, tarjetas, recuerdos, etc. es algo ya normal, que muchas veces desvirtúan el simbolismo de la ocasión y de una tradición ancestral, en la que toda la familia acude al cementerio llevando ofrendas y comida principalmente para compartir con el difunto como una forma de gratitud hacia él.

La colada morada y la guagua de pan son una parte de esta tradición, la misma que debemos mantenerla, como un sello identitario de lo que es nuestra cultura, nuestro pueblo y nuestras propias costumbres.
Conmemoremos una vez más a los seres queridos que ya no están entre nosotros y hagámoslo con un profundo respeto y unidad familiar, manteniendo nuestras creencias y demostrando nuestra rica herencia tradicional.